
24/06/2025
No es solo una piedra. Es una pregunta sin respuesta.
Imagina tallar una roca gigante sin máquinas, sin planos, sin metal…
Y lograr que encaje con otras 17 caras distintas, como si cada milímetro conociera su lugar desde siempre.
Así trabajaban los antiguos peruanos.
No con fuerza bruta, sino con una precisión que aún hoy, con láseres y cálculos digitales, no podemos igualar.
No hay cemento.
No hay grietas.
No hay margen de error.
Esto no fue arte decorativo.
Fue ciencia aplicada. Sabiduría estructural.
Una arquitectura pensada para resistir terremotos, siglos antes de que existiera siquiera la palabra “sísmico”.
Y aún hay algo más que inquieta:
Estas construcciones no son únicas en el mundo.
¿Podrían tener un origen común… muy anterior a todo lo que creemos saber?
¿Una raíz que se remonta a civilizaciones olvidadas, quizás desde los antiguos pueblos que sobrevivieron al Diluvio… o incluso desde Sumeria?
Las conexiones existen. Aunque no siempre queremos verlas.
🌀 A veces el misterio no está en lo que falta, sino en lo que ya está ahí… y no comprendemos.
👣 Ven, míralo tú mismo.
Tal vez la historia que te contaron… no es toda la historia.