
18/06/2025
Nuestro embajador Antonio García Fotografías nos invita a conocer uno de esos rincones de San Fernando que vale la pena ser explorados.
¡Adéntrate en el Callejón Croquer, una joya escondida en el corazón de San Fernando que te transporta en el tiempo! Trazado con esmero a finales del siglo XVIII, al igual que la emblemática Calle Real, este pasaje estrecho y pintoresco ha forjado su propia leyenda, convirtiéndose en uno de los rincones más singulares de la ciudad. Su nombre evoca la estirpe de los Croquer, ilustres propietarios que marcaron su historia desde 1754, cuando Rafael Croquer de los Cameros lo adquirió en subasta pública. Entre sus adoquines resonaron los pasos de Esteban Miguel Croquer, regidor de la villa en 1786, cuyas decisiones moldearon el futuro de la entonces incipiente San Fernando.
Pero la belleza de este callejón no es fruto del azar. En 1971, el clamor de los vecinos, recogido por el rotativo local "El Mirador de San Fernando", impulsó una transformación que lo dotó de un encanto especial. Macetas rebosantes de color adornaron sus ventanas, la cal y la pintura rejuvenecieron sus muros y marcos, y en un acto inaugural el 1 de noviembre de aquel año, se colocaron con devoción los cuadros del Nazareno y la Virgen del Carmen, que hoy velan por sus transeúntes. Décadas después, en 1992, una nueva capa de historia se añadió con su actual pavimentación decorativa, el zócalo y marcos de piedra ostionera, la elegante viguería de madera y las capillas que custodian estas veneradas imágenes. El Callejón Croquer es, sin duda, un testimonio vivo de la historia y el espíritu comunitario de San Fernando.